Seis años con el corazón partido

Pues ya van seis, y pensamos que el tiempo todo lo cura. Todos los años a tal que a día de hoy me despierto con una extraña sensación de pena que me embarga y aun me planteo la razón. Que amanezca el 21 de agosto me supone que la cabeza se me llene de recuerdos, y no buenos precisamente. Recuerdo la histeria, estómagos cerrados, la tristeza, la agonía, el intento de que otros serers queridos no se nos fueran detrás por el disgusto.
Veo los anuncios de la DGT y me planteo si son lo suficientemente duros. No se explicar el dolor que se siente cuando de un día para otro dejas de ver a un ser querido que para colmo significa tanto para uno por su carisma y por su integridad. Tan sólo se que me falta, me falta cada día, todavía hay alguna canción que me hace llorar porque me le evoca...
Le veo en los cuartos menguantes por su sonrisa de gato de Alicia en el país de las maravillas, y le veo leyendo "Nosotros" sintiendose orgulloso de mí.
Ha sido exagerado hasta para morirse. Qué cosas tiene el destino.
Hoy te recuerdo, aunque no te olvido. Eres ese trocito de vena que me extirparon hace seis años y de lo que todavía no me termino de recuperar.
Nunca te lo dije, pero para mí has sido un ejemplo. Y cuando me veo en una situación chunga pienso en lo que me dirías y en cómo actuarías tú.
Seis años con un vacío que nadie llena...
Seis años en los que me falta el consejo sabio que siempre me dabas cuando era oportuno.
Qué tu carisma nunca me abandone.